¿Por qué todo lo que tiene que guardarse debe estar escondido tras las puertas de los closets? Dejemos que salgan del closet , dejemos que se vean.
Esto es una invitación para acabar con la creencia de que los closets tienen que ser cerrados. Si mantener el orden es una tarea complicada, al tener el almacenamiento sin puertas, podemos establecer un sistema de organización que por sí solo nos exigirá esfuerzo al principio, pero con la práctica, lo conseguiremos de forma natural.
¿Qué beneficio nos aportan los closets desnudos?
Para empezar, tendremos todo a la vista. Nada quedará arrinconado y daremos uso a todos los objetos que antes se quedaban rezagados en el fondo del closet. Es un sistema de almacenamiento que puede ser utilizado tanto en closets estándares como en los closets hechos a la medida. Y para terminar, ahorraremos en las piezas más costosas: las puertas y los herrajes para su montaje.
¡ Salgamos del closet !
Este closet abierto compuesto por estantes y gaveteros reciclados de madera, ofrece un ambiente de otra época. Las escaleras recuerdan las bibliotecas con estanterías muy altas. El conjunto se fusiona a la perfección con la decoración de la habitación, creando un ambiente muy acogedor.
Se ha ajustado un closet de medidas estándar a un espacio desocupado de la habitación. Este sistema modular de almacenamiento es dinámico ya que ofrece la oportunidad de poder modificarlo, agregándole piezas o quitándole, según sea la conveniencia: tubos para colgar ganchos, gavetas y baldas.
Una de las ventajas de no ubicar puertas, es poder aprovechar los rincones y espacios residuales de la vivienda. Debajo de las escaleras es un lugar perfecto de almacenaje. Para optimizar el espacio sugerimos ubicar gaveteros en el perímetro, creando una suerte de encimera que ordena horizontalmente. El tubo de colgar la ropa siguiendo la vertical, y en a parte más alta, repisas para cajas y utensilios que no se requieren diariamente.
Si se dispone de una habitación pequeña a la que no sabemos que función darle, esta opción resuelve el problema de acumulación de ropa por la casa y la concentra en un único espacio. Con una disposición sencilla de gaveteros en la parte inferior, tubos para colgar en la altura media y en la parte superior repisas, se configura un vestidor cómodo y práctico.
Una idea de organización es concentrar de un lado la ropa que se almacena colgada en ganchos y del otro lado la ropa que va doblada, zapatos y cajas. De esta forma, se puede disponer de la ropa a la vista separada por categorías.
Más que un closet, es una pieza más de decoración. Hábilmente se consigue que el aspecto final sea como un escaparate donde se ubican desde el vestuario y la peinadora hasta objetos decorativos. Una alternativa ideal para integrar el closet a la habitación.
Hasta los más pequeños de la casa pueden disfrutar de un closet sin puertas. Proponemos ubicar en la parte baja todos los elementos que a ellos les gusta acceder, tales como los juquetes, y a la parte superior ubicar todo lo que requiere más orden como la ropa y lencería.
Otro ejemplo de closet modular. De una forma muy sencilla aprovecha la pendiente bajo el techo repitiendo el mismo patron con diferentes opciones de almacenado.
Existen en el mercado closets pequeños de una sola unidad que sirven a modo de perchero para la entrada de casa, o para la habitación de invitados.