Para hablar de estilo, glamour y elegancia en el diseño residencial, la casa que conoceremos hoy es el ejemplo perfecto.
La vivienda, creación del arquitecto Sado Azuma, cuenta con un diseño bastante discreto al exterior que, sin embargo, no deja duda del buen gusto de sus propietarios. Se distribuye en dos plantas y un sótano, debido al desnivel del terreno, en donde se alberga el garaje y, por medio de unas escaleras, se comunica con la zona de servicio de la primera planta. Además, tiene un espacio de cochera en la fachada principal y un largo muro curvo protege el jardín y separa la vía peatonal del patio y el área de la entrada.
Sin más, te invitamos a conocer esta maravillosa casa y a sorprenderte.
Desde esta perspectiva, la fachada luce discreta, de buen gusto y estilo bastante reservado. Un portón de herrería negra destaca entre las superficies en cremosos colores neutrales, y una pequeña cochera se asoma a la derecha.
La segunda planta tiene un balcón al frente en alguna de las recámaras, y una larga barda curva alberga el jardín frontal.
Si rodeamos el muro curvo nos encontramos con una vista un poco más luminosa: la misma barda se abre en una zona de garaje en desnivel, que contiene, además del espacio para autos, una zona de servicios y escaleras. En la segunda planta se alcanzan a apreciar algunas plantas, haciendo notar que se el jardín frontal se extiende hasta convertirse en terraza. Y otro balcón deslumbra elegantemente en el tercer nivel.
Tan sólo son unas escaleras de servicio para comunicar el garaje con los interiores, y su diseño es de concurso. Sin duda el estilo de esta casa cada vez se va sofisticando más y más…
Regresando a la primera fachada y después de cruzar el jardín y el patio, nos encontramos frente al acceso principal. Un umbral protegido por un techo curvo y revestimiento de piedra laja genera una bienvenida cálida y armoniosa.
Y cruzando la puerta nos recibe un gran organizador, de madera oscura, rodeado de piedra, elegante, sutilmente iluminado, ¡un espacio encantador!
Tras pasar el recibidor, una celosía de madera oscura nos dirige hacia el área social, en donde una luminosa sala nos invita a descansar sobre los confortables sofás de cuero negro.
El piso es de un cremoso color blanquecino que permite una perfecta simbiosis entre las tonalidades marrones de la piedra y el glamour del cuero y el cristal.
Contrastando con la madera oscura, las tonalidades neutrales y la claridad del piso y las paredes, el comedor se destaca por su color rojo en madera lustrosa y sillas de cuero. Un hermoso grupo de luminarias colgantes, en un curioso diseño de conos invertidos, corona el espacio elegante y audazmente.
Nos despedimos desde la cocina, admirando la perfección de su superficie de acero, el diseño de la zona, el largo mueble organizador debajo de la ventana, la luminosidad que destella en cada rincón y la glamourosa atmósfera que el conjunto de elementos ha creado.
Te invitamos a seguir disfrutando de diseños de otro mundo visitando esta casa sencilla por fuera pero maravillosa por dentro.