7 ambientes rústicos que querrás copiar

El estilo rústico es una tendencia que confiere a los ambientes un toque acogedor de lo más interesante. Este salón aglutina multitud de recursos propios de esta corriente dando vida a una estancia cálida y llena de encanto. Los colores se acompañan de un mobiliario en cuero que se completa con rasgos inconfundibles de este estilo. Las vigas de madera vistas o la chimenea convertida en punto focal de la habitación son, sin duda, reclamos incontestables de un salón rústico de película. 

Si hay un material que represente el estilo rústico por excelencia esa es la madera. Los interiores vestidos con esta corriente la emplean en multitud de elementos y, en este caso, prácticamente la totalidad del diseño se hace empleando esta materia prima. Los tonos claros que copan el espacio envuelven al visitante en un ambiente extremadamente cálido y acogedor, junto a ellos, muebles de líneas minimalistas permiten un espacio singular y lleno de detalles como la librería integrada en el techo.

Y del comedor a la cocina para rescatar otro diseño de estilo rústico que, nuevamente, emplea la madera como elemento principal. La modernidad de las líneas del mobiliario encaja a la perfección con el uso de este material, haciendo de la cocina un espacio de que invita a ser disfrutado. Junto a esta combinación encontramos otros elementos propios de ambientes rústicos como el suelo con baldosas de terracota rectangulares, el broche de oro a un escenario ideal para disfrutar del arte gastronómico.

Aunque en la mayoría de las ocasiones los ambientes rústicos ponen el acento en materiales como la madera o la piedra, no es menos cierto que existe un amplio catálogo de recursos que pueden incorporarse a las estancias para vestirlas con este estilo. Las alfombras, por ejemplo, son uno de esos complementos perfectos para dotar a los salones rústicos de un encanto especial. Si todo eso se añade un sofá cómodo, un entorno natural y algún que otro ingrediente propio de estos ambientes, pocos podrán resistirse a sus encantos. 

Cualquier estancia del hogar puede convertirse en escenario perfecto sobre el que desarrollar tu pasión por el estilo rústico. Este dormitorio es un buen ejemplo de cómo esta corriente puede trasladarse a la habitación más personal de la casa cuidando con mimo cada detalle. Los tonos claros, las vigas de madera, los acabados del mobiliario… Cada pequeño matiz de los elementos que componen el diseño de interiores de esta habitación refuerza la calidez de un ambiente rústico indiscutible. 

Como comentábamos al inicio de este libro de ideas, el estilo rústico ha abandonado las casas de pueblo para colarse en todo tipo de hogares y eso se nota también en la manera de introducirlo en el diseño de interiores. En este caso, la madera vuelve a ser el hilo conductor de una tendencia que comparte protagonismo con las líneas contemporáneas del mobiliario  y los complementos.

Si eres de los que gusta de reinventar los estilos, seguro que te interesa nuestro libro de ideas: Country chic: lo rústico nunca fue tan moderno.

En la última parada en nuestro repaso por ambientes rústicos que querrás copiar rescatamos el protagonismo de otro de los elementos más característicos de este estilo: la piedra. Su presencia coloniza cada rincón de esta estancia en la que se alternan diferentes tipos de piedra dando como resultado un espacio lleno de magia y romanticismo. Tampoco faltan las vigas de madera y el mobiliario de corte tradicional que, en conjunto, dan vida a un espacio equilibrado que transmite serenidad. ¿Quién podría resistirse?