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A lo largo de la historia, el ser humano se las ha ingeniado para desarrollar herramientas que hagan de los procesos de vida algo más fácil. Es así entonces, y gracias al avance de la tecnología, que hoy podemos disfrutar y aprovechar los beneficios del desarrollo en la industria de las materias primas.
Conocido como uno de los oficios más antiguos de la historia, la carpintería remonta a los orígenes de las herramientas de mano como una respuesta del hombre para crear objetos útiles para el progreso y avance de la humanidad. Desde muebles hasta casas, marcos, puertas y juguetes, sin duda esta disciplina hace que hoy podamos vivir como lo hacemos.
Si bien esta actividad comenzó trabajando la madera, en la actualidad también podemos encontrar otros tipos de carpintería y es de lo que queremos hablar hoy. Si aún no sabes qué es la carpintería metálica y de aluminio, sigue deslizando y descubre los beneficios de esta disciplina.
El término carpintero viene de la palabra francesa “Carpentier”, que significa “fabricante de un transporte” y esta especialidad remonta a miles de años en la historia, cuando el hombre fabricaba y utilizaba herramientas de mano.
La definición de carpintero describe a una persona que se dedica a la construcción de objetos y edificios con madera debido a su conocimiento y experiencia con los materiales.
En los últimos años, la carpintería se ha visto muy favorecida gracias al rápido desarrollo de la tecnología. Esto ha permitido ampliar el campo de trabajo y sus distintas variaciones de materias primas, que abarcan desde la clásica madera, hasta el metal y el aluminio, entre otros.
El concepto de carpintería abarca tanto al producto final, como al taller y al que lo desempeña. El material que se utiliza es el metal, y contempla también el uso del latón, el cobre, el acero, el PVC, el bronce y el hierro para construir diferentes accesorios y herramientas para el hogar como muebles y elementos de construcción.
La razón que hace tan atractiva a la carpintería metálica es la garantía de durabilidad, su capacidad de aislamiento, su calidad y además hace más cómoda su mantención y limpieza. Entre sus aplicaciones encontramos mamparas, cerramientos, techos, persianas y marquesinas. Así mismo, cerramientos de terrazas y escaparates, celosías, paneles ciegos, cerramientos domésticos y ventanas. Y también en trabajos artísticos de forja como rejas y verjas, escaleras y barandillas para interiores y exteriores.
Es importante mencionar que este tipo de actividad no sólo se aplica en los hogares, sino que es muy demandada también en la construcción y reformas de edificios industriales, entre otros.
Este tipo de material para la construcción de accesorios y herramientas ofrece diversos beneficios:
Debido a su gran variedad, cada tipo de material es más adecuado para ciertos trabajos. En relación a esto te damos unos ejemplos:
La carpintería de aluminio es una rama de la carpintería metálica, pero se diferencia por tener usos más particulares.
Es ideal para la construcción de elementos decorativos y accesorios para la casa como también para oficinas o espacios industriales.
La carpintería metálica tiene muchas ventajas. Es un material que presenta averías mínimas debido a que es un metal oxidado por naturaleza, lo que significa que no sufrirá nuevas oxidaciones que afecten o disminuyan su resistencia en el futuro. Así mismo es un material resistente y liviano y destaca por su fácil mantenimiento.
Así mismo, el aluminio es un material que respeta el medio ambiente ya que su costo de fabricación no considera elevados costos energéticos, además de ser reciclable y no es tóxico. También podemos mencionar como una gran característica su versatilidad y usabilidad, pues es un metal adaptable a cualquier tipo de proyecto arquitectónico.
Un ejemplo de esto se retrata muy bien cuando hablamos de la fabricación de ventanas.
Dado que los perfiles de aluminio no atraen la suciedad, garantiza nunca contraer humedad, daños por radiación solar o cualquier otra incidencia meteorológica. Esto no sucede con la madera, por eso considera esta opción en tu proyecto puede traer grandes beneficios a largo plazo.
La carpintería de aluminio requiere la manipulación de herramientas y equipos de suma precisión, por eso siempre recomendamos acudir a un experto que pueda asesorarte ya que conoce la forma correcta de manipular este material. Es ideal para realizar juntas de suma precisión para cerramientos, ventanas, fachada flotante, estructuras de cubiertas etc. Para trabajar en la carpintería de aluminio.
A pesar de ser un metal muy resistente, el aluminio no es recomendable para estructuras de edificación, por su alto costo y por su característica de fundación a baja temperatura.
El aluminio es un material muy versátil con el que tendrás garantía de alta durabilidad en todos los elementos en los que lo incorpores:
En la actualidad, son miles los productos que participan en nuestra vida diaria, y todo gracias a la carpintería. Su versatilidad hace posible la adaptación de esta disciplina en múltiples tipos de diseños y sin duda agrega un toque diferentes a tus espacios. Por ello, te invitamos a integrar estas increíbles ideas en tu proyecto arquitectónico.
